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Mi experiencia como voluntario en un torneo de golf

Ser Voluntario En Un Torneo De Golf

La semana pasada participé por 1ª vez en mi vida como voluntario en un torneo de golf. En concreto en el Open de España celebrado en el Centro Nacional de Golf.

Ya había ido más veces a torneos de golf profesionales y lo que tenía claro es que es mucho más divertido andar por el campo y ver a los jugadores de cerca que hacerlo desde la carpa VIP.

La última vez que estuve en la carpa VIP de un torneo de golf, comí, bebí y reí con los amigos, pero casi no vi golf.

Además, una de las grandes ventajas que tiene el golf sobre el resto de los deportes, es que en los torneos de golf te mezclas con los jugadores al máximo, hasta el punto de poder andar con ellos, verlos entrenar en la cancha de prácticas o charlar tranquilamente con ellos.

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Ser voluntario

Lo primero que me llamó la atención es que cuando decidí ser voluntario, mucha gente no lo entendía: ¿por qué, cuánto te pagan?

Es una pena, pero en España no existe ese espíritu de servicio que existe en otras comunidades, donde a la gente le gusta ser parte de los eventos, participar, ayudar a que sea un éxito, en definitiva, aportar tu granito de arena.

Yo mismo tuve muchas dudas, ¿para qué?, como tengo pocos compromisos me pongo otros… En fin, al final me decidí y no me arrepiento.

Aparte del tema de colaborar, está el tema de ver el torneo desde dentro y esto es una verdadera pasada. Para un apasionado del golf como soy yo, haber estado como voluntario en un torneo de golf y pasar todo un partido al lado de los jugadores, escuchándoles, viendo lo que hacen, lo que sufren y lo difícil que es, ha sido una experiencia inigualable.

La organización

Es muy triste que haya más gente dispuesta a criticar que a ayudar, pero ese es uno de nuestros grandes defectos. Yo habiendo estado dentro, me atrevo a decir que, aunque hay unas cuantas cosas que se pueden mejorar, la gran mayoría está muy bien pensado y funciona muy bien.

En total en el Open de España estuvimos más de 300 voluntarios y coordinar tareas de tanta gente es algo extremadamente complicado, más si tienes en cuenta que en la mayoría de los casos somos gente sin experiencia, sin embargo, todo funcionó muy correctamente.

¿Qué aprendí como voluntario en un torneo de golf?

Lo primero que si te organizas, tienes tiempo para esto y para mucho más, como siempre digo, hay que tener en equilibrio tus micromundos, pero no me quiero poner en plan profundo y hablar de cosas filosóficas, por lo que sólo voy a hablar de las cosas que aprendí relacionadas con el golf:

  • Qué difícil es este deporte. Jugadores profesionales que le dedican 8 horas diarias a este tema y cómo sufren en el campo. ¡qué complicado es todo!
  • Qué bien juegan los pros. El sábado y el domingo estuve de walking scorer en 2 partidos de la gente que ya no tenía ninguna oportunidad y sin embargo, en casi todos los hoyos tienen oportunidad para birdie.
  • La diferencia la marca el put. Todos están en “Green in regulation” o si no aprochan y dejan la bola muy cerca. Los que están fallones con el put son los que se cargan de bogeys y los que las enchufan son los que hacen muchos birdies.
  • No hay un físico especial para el golf: hay jugadores de todos los tamaños y dimensiones. Llama la atención que hay jugadores de 1,70 hasta de más de 2 metros. Super delgados, fibrosos, musculosos o hasta incluso muy gordos. Da igual, a la hora de jugar al golf todos pueden hacerlo bien.
  • Nada más difícil que repetir un buen swing todo el día. Impresionaba ver a los jugadores en la cancha de prácticas preocupados por cada pequeño detalle de su movimiento.
  • También hay máxima variedad en cuanto a caracteres: ves jugadores muy serios que casi no hablan, otros que no paran de hablar, sobre todo con su caddie; unos super fríos que no muestran sus emociones, otros que no paran de despotricar; jugadores que se echan la culpa a ellos mismos y ante un fallo analizan que han hecho mal y otros que cuando fallan siempre encuentran una excusa externa.

En definitiva, cada jugador es de su padre y de su madre. Yo que tengo hijos que juegan al golf y que me preocupo por el golf infantil tengo claro que tipo de deportistas querría que fueran mis hijos, pero lo que he aprendido en este Open como voluntario en el torneo, es que pueden ser muy diferentes y también pueden tener cabida en este deporte.

Conclusión

Como todo en la vida, cuando das desinteresadamente, siempre sueles recibir más a cambio.

¿repetiré? Seguramente si.

¿Lo recomendarías a tus amigos? Si, sin duda.

 

Conrado MartínezAutor: Conrado Martínez
www.conradoymas.com

 

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